Autor de los dos goles de anoche y uno de los jugadores que siempre fue al frente, Cristian Pavón fue uno de los indiscutidos aprobados ante Independiente del Valle pese a la dura derrota del equipo.
Anoche, durante el final del partido llegó la primera ovación para Cristian Pavón. El «Olé, olé, olé, olé… Pavón… Pavón» se pudo escuchar desde la tribuna luego del segundo gol (golazo) que anotó el pibe surgido de Talleres.
Desde el arranque, el mediapunta demostró estar en otra Sintonía con respecto al equipo. El único que se le acercó fue Fernando Zuqui, pidiendo siempre ser parte del circuito de juego.
En Ecuador se sintió su falta. Boca padeció en el segundo tiempo la falta de aire y velocidad. Pero el delantero tuvo que cumplir una fecha de expulsión por la infantil roja recibida con Nacional.
En el minuto cuatro se encargó de alimentar la ilusión del hincha de Boca de acceder a una final. Frank Fabra se juntó con Nicolás Lodeiro y envió un centro al área que parecía perdido pero el siete llegó y la empujó.
Luego Boca perdió el rumbo y no supo como levantarlo pero Pavón siguió yendo hacia adelante. A veces abusó y se equivocó, intentó de más en lugar de tocar con un compañero. Pero no se puede dejar de destacar que apenas con 20 años sea el jugador que tire adelante al equipo.
Así, después de intentar varias veces antes con un «balde en la cabeza», probó de afuera y la clavó pegada al palo para maquillar un resultado un poco más digno para el Xeneize.
Angelici lo declaró intransferible pero está claro que de continuar con el nivel que viene mostrando, será difícil de sostenerlo con la camiseta de Boca.